MAESTRO GUILLERMO MONTES ANTÚNEZ

Mi Trayectoria

Mi vida, como practicante en las Artes Marciales, está marcada positivamente, ya que he tenido en las diferentes disciplinas que he practicado muy buenos profesores y Maestros. Por ejemplo, en Karate mi Profesor fue Sebastián Cordero, de nacionalidad venezolana. Con él comencé mis prácticas a los 7 años y medio, teniendo que dejarlas casi a los casi 14 años ya que él, por motivos familiares, tuvo que viajar a su país.

En ese tiempo fue cuando conocí al Maestro de Kung Fu, director de la línea Tsung-Chiao, Sifu Miguel Ángel de Luca Gárate, el cual marcó en mis prácticas la disciplina marcial e inculcó en mi personalidad el sacrificio, la dedicación, el compañerismo y la esencia de las Artes Marciales, siendo un gran Guía Espiritual y por el cual siento un gran respeto y admiración.

A fines de los años ochenta, conocí al Maestro Daniel Hernández, de nacionalidad argentina, gracias al cual me acerqué a una de las Artes Marciales más hermosas que he practicado en mi vida: el Ninjutsu, el Arte Ninja. En ese momento comenzaron mis problemas como practicante marcial, ya que el Ninjutsu no estaba reconocido en Chile, ni siquiera como Arte Marcial en la legislación chilena. El comenzar a practicarlo -y en algún momento a enseñarlo- me acarreó muchos problemas con algunos "Maestros", que en esos momentos eran mirados como verdaderos dioses en las Artes Marciales en Chile, señores que miraban las Artes Marciales siempre desde el punto de vista comercial. Lo digo, porque a principios de los años noventa, cuando di mi examen como representante para Chile de Ninjutsu -en el cual fui reprobado-, uno de ellos se me acercó después de mi examen y me dijo textual: "Cabrito, no te podemos autorizar con el Ninjutsu en Chile, ya que no podemos perder la gallinita de los huevos de oro". En ese momento, perdí el respeto por algunos "Maestros" chilenos de Artes Marciales y otros a los que ahora por ley su Arte les está reconocida como deporte Olímpico. Bueno, con el tiempo he ido madurando estas situaciones y me han servido para no cometer los mismos errores. Así que, después de todo, doy las gracias a estos "Maestros" por la enseñanza.

Una de las recomendaciones que me dio en ese momento la D.G.M.N. fue que me acercara a algún Profesor o Maestro de alguna Disciplina Marcial, que tuviera reconocimiento del Ministerio de Defensa Nacional. En ese momento, comencé mis prácticas de Tang Soo Do con el Maestro chileno, Sr. Marcos Beltrán Troncoso. De este Maestro también recibí mucho apoyo.

Con el tiempo conocí a mi amigo, Sr. Luís Vicente Fuentes, en ese tiempo Maestro de Hapkido, quien es para mí uno de los mejores docentes y exponentes chilenos. De él siempre recibí un apoyo incondicional y siento gran orgullo de haberlo conocido. De ese momento en adelante, comencé prácticas de Kobudo. En el año 2004, inicié mis prácticas de Jiu Jitsu, de la línea del Maestro de Inglaterra, Sôke Bryan Cheek, del cual tengo la representación para Chile.

En mi camino marcial, tuve muchas experiencias buenas, aunque a veces también algunas con grandes decepciones, que marcaron mi vida y me hicieron comprender qué extraordinarios y qué inmorales podemos llegar a ser los seres humanos.

 
Hoy habia 3 visitantes (4 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis